La conexión entre la dieta y la psicología es bien conocida. Sin embargo, hay muchas personas a las que les cuesta mantener su peso en los niveles deseados porque normalmente no pueden resistir la tentación o siguen comiendo cuando en realidad no tienen hambre. Esto se debe a que, aunque sepamos lo que necesitamos comer, existen factores adicionales que afectan la cantidad y el tipo de alimentos que consumimos. Uno de estos factores es el estrés, que está directamente relacionado con el comer emocional.
Las razones por las que comemos cuando no tenemos hambre…
Las principales causas que se «esconden» detrás de este fenómeno, incluyen:
1. Deseo por… cortisol
El estrés excesivo puede resultar en niveles elevados de cortisol, también conocida como la «hormona del estrés». El cortisol es bueno para el cuerpo, sin embargo, los niveles excesivos de cortisol que pueden ser causados por el estrés crónico pueden causar más problemas. Un efecto negativo del cortisol es el fuerte deseo de comer bocadillos dulces o salados, lo que resulta en un posible aumento de peso.
2. Comida «social»
A menudo, cuando sentimos estrés, presión o ansiedad intensos, recurrimos a nuestros seres queridos o amigos para que nos apoyen. Se ha observado que este soporte suele acompañarse de todo tipo de alimentos desde chips salados, chocolates y todo tipo de “comfort food”. Estos incidentes son formas sociales de comer emocional, es decir, la forma de llenar el vacío emocional o de «tapar» nuestras preocupaciones con el disfrute temporal de la comida sabrosa.
3. «Ahoga» tus emociones
Otra razón por la que algunas personas recurren a la comida son los sentimientos incómodos. Las personas que no conocen la forma de manejarlos de forma adecuada y útil pueden optar por «esconderlos», comiéndose un rico helado, ya que aunque sea por un rato parecen «escapar» de ellos. En realidad, sin embargo, este no es el caso, ya que pueden olvidar por un tiempo lo que les preocupa, pero luego serán llamados a enfrentarlos. Al mismo tiempo, esta estrategia poco saludable puede conducir a largo plazo a un aumento de los niveles de peso y a más problemas de salud.