Cuando los niveles de humedad caen por debajo del 30%, en casa o en la oficina, aumenta el riesgo de varios problemas de salud.
Vea cómo el aire seco puede afectar su salud y qué puede hacer para protegerse.
Enfermedades respiratorias
Según los médicos, los síntomas del asma, especialmente las convulsiones, pueden agravarse con el aire frío y seco. Los síntomas de bronquitis, sinusitis y otras enfermedades respiratorias también pueden empeorar si pasa mucho tiempo en un ambiente con demasiado aire seco.
Dolor de garganta
Cuanto más baja sea la temperatura y la humedad del aire, más dolor e irritación tendrás en la garganta. Entonces, si se despierta en medio de la noche y le resulta difícil tragar, verifique los niveles de humedad y temperatura en su hogar.
Irritación de ojo
Si trabaja en un ambiente de oficina donde el aire acondicionado mantiene baja la humedad, el aire seco puede afectar la película lagrimal que protege su córnea. La presencia de aire seco agrava los problemas por uso excesivo de pantallas, como enrojecimiento y dolor, conjuntivitis y en casos más severos queratitis.
Piel seca y dermatitis
Según los investigadores, el aire interior seco, especialmente en ambientes con aire acondicionado, puede provocar una piel seca y áspera. El aire seco también puede empeorar los síntomas del eczema y la dermatitis atópica.
Sangrado de la nariz
La rinorrea es un resultado común del aire seco. Si bien las hemorragias nasales son más comunes durante los meses de invierno cuando los hogares y las oficinas se están calentando, pueden ocurrir en cualquier época del año cuando la humedad es baja.
Mayores niveles de estrés
Períodos prolongados en aire interior muy seco pueden aumentar sus niveles de estrés. Según la investigación, el aire seco aumenta la frecuencia cardíaca y afecta negativamente el sueño.
Deshidración
Pasar largos períodos en un ambiente interior muy seco puede agotar los niveles de líquidos corporales. La concentración de orina es un biomarcador característico de la deshidratación.
Riesgo de infección
La evidencia clínica sugiere que el aire seco y caliente puede aumentar el riesgo de influenza e incluso de neumonía, lo que prolonga la vida de los virus. Además, puede afectar su capacidad para combatir infecciones virales al debilitar y encoger la mucosidad nasal, parte de las defensas naturales de su cuerpo contra estos gérmenes.
Para mantener un ambiente saludable, se recomienda mantener niveles de humedad en el interior de 30% a 50%. También puede usar un humidificador, limitar su ducha de agua caliente y usar lociones, bálsamos y aerosoles humectantes para lubricar su piel, labios y senos paranasales.
Si continúa teniendo problemas de salud después de realizar estos cambios, es posible que desee comunicarse con su médico para descartar cualquier problema de salud subyacente.