Hay muchos motivos que nos pueden causar una ansiedad y un estrés intensos, como la presentación de un gran proyecto, en el que trabajamos durante mucho tiempo o incluso acontecimientos repentinos que nunca esperábamos que sucedieran. Sin embargo, hay muchos que experimentan una ansiedad intensa en un momento en que nada de lo anterior está sucediendo. En este caso, los pensamientos y los posibles escenarios pueden «inundar» nuestro cerebro, lo que resulta en una fuerte presión, ya que los niveles de estrés «suben» a alturas peligrosas.
El estrés es la «respuesta» a un estímulo estresante, externo o interno, apareciendo los síntomas a nivel físico, emocional o incluso social. Independientemente del estímulo que desencadenó nuestra ansiedad interior, existen ciertos hábitos que podemos incorporar a nuestra rutina diaria para reducir el estrés innecesario y deshacernos de escenarios ominosos.
3 hábitos diarios que reducen el estrés
Jardinería
La jardinería es conocida por sus beneficios para la salud mental. Ya sean las macetas del balcón o de tu jardín, el cuidado de tus plantas puede ser una
