Tarta salada con queso feta y zanahorias

En lugar de zanahorias, puedes usar todo lo que tengas, desde cebollas y calabacines hasta remolachas.

Lo importante es cocer las verduras antes de colocarlas en la tarta sino se humedecerán y la masa se mojará y no se hinchará.

Si encuentras zanahorias de colores el resultado será impresionante.

Materiales:

Harina
1 hoja de hojaldre (descongelada)
500 gramos zanahorias (peladas y cortadas a lo largo)
1 cucharada. aceite
Sal pimienta
200 gramos ricotta
120 gramos Feta (triturado)
1 diente de ajo (rallado)

Implementación:

Precaliente el horno a 200. Sobre una superficie ligeramente enharinada, extienda la masa de hojaldre. Con un cuchillo, corte suavemente un marco dentro de la masa de hojaldre (alrededor de una pulgada del contorno).

Coloca la masa de hojaldre sobre papel de horno y pincha la masa dentro de los bordes de la zona que has tallado con un tenedor para que no se hinche en el centro.

Hornee en la parrilla superior hasta que la masa de hojaldre esté ligeramente dorada, aproximadamente 20 minutos. Sácalo del horno y déjalo enfriar un poco.

Mientras tanto, rocíe las zanahorias con una cucharada de aceite, sazone con sal y pimienta y extiéndalas en una sola capa sobre una bandeja para hornear. Ase las zanahorias en la parrilla inferior (debajo de la masa de hojaldre) hasta que se doren (15 a 20 minutos).

Mientras el hojaldre y las zanahorias están en el horno, bate la ricota, el queso feta y el ajo en la licuadora y sazona con sal y pimienta.

Extienda la mezcla de queso sobre la masa de hojaldre hasta el borde que ha dibujado y coloque las zanahorias en una sola capa. Cocine hasta que las zanahorias estén blandas (otros 15 a 20 minutos).

Rociar con un poco de aceite de oliva y servir con un poco de perejil picado o cebollino.

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