Los labios secos, hinchados o descoloridos avergonzarían a la mayoría de las mujeres. No solo porque no podríamos aplicarnos el pintalabios o intercambiar besos con nuestra persona amada, sino también porque tendríamos un fastidio constante en un órgano realmente muy sensible de nuestro cuerpo.
Sin embargo, unos labios bonitos y suaves no son solo una cuestión estética, ya que pueden informarnos sobre una serie de problemas de salud graves.
Por supuesto, no todos los síntomas nuevos en esta área necesariamente indican algo de qué preocuparse. Sin embargo, los expertos recomiendan que vigiles atentamente tus labios para ver si cambian de color, textura o tamaño.
¿Qué indican los labios secos y agrietados?
Los labios no tienen glándulas sudoríparas ni sebáceas como el resto de nuestra piel. Esta es la razón por la que los labios se secan y se «agrietan» con más frecuencia que el resto del cuerpo.
La sequedad y el agrietamiento son, con diferencia, los síntomas más comunes que afectan a los labios y, por lo general, indican una deshidratación básica o cambios climáticos extremos.
Cuando tu piel está deshidratada se vuelve seca, lo mismo sucede con tus labios cuando se «abren». Los labios agrietados pueden empeorar cuando las personas muerden o pelan la piel de los labios o, a menudo, lamen el área problemática en un intento de hidratarlos. De hecho, dicen los expertos, la saliva no hidrata los labios, al contrario, los seca mucho más.
Bebiendo agua y manteniendo los labios hidratados, aplicando localmente un buen bálsamo labial, normalmente no volverás a tener problema. Sin embargo, existe la posibilidad de que la causa subyacente de sus labios agrietados sea una alergia o una dermatitis de contacto de una
