Los tres ensayos de Schopenhauer: Qué es el hombre, qué posee el hombre, qué representa el hombre
¿Quién de nosotros no ha conocido a una persona (quizás a nosotros mismos) tan introvertida, tan absorta en la acumulación de bienes, o en lo que piensan los demás, que pierde todo sentido de sí misma? Tal persona, cuando se le hace una pregunta, busca la respuesta hacia afuera y no hacia adentro. En otras palabras, recorre los rostros de los demás, para adivinar qué respuesta quieren o esperan.
Para un hombre así, encuentro útil resumir una trinidad de ensayos escritos por Schopenhauer hacia el final de su vida. (Para cualquier persona con tendencias filosóficas, están escritos en un lenguaje claro y accesible para el no especialista). Básicamente, los ensayos enfatizan que lo único que importa es lo que es la persona. Ni la riqueza, ni los bienes materiales, ni el estatus social, ni la buena reputación traen felicidad. Aunque estos pensamientos no abordan específicamente cuestiones existenciales, nos ayudan a pasar de un nivel superficial a cuestiones más profundas.
1. lo que poseemos. Los bienes materiales son engañosos. Schopenhauer argumenta muy elegantemente que la acumulación de riqueza y bienes es interminable y no ofrece satisfacción. Cuanto más tenemos, más se multiplican nuestras demandas. La riqueza es como el agua de mar: cuanto más bebemos, más sed tenemos. Al final no somos dueños de nuestros bienes – nosotros los poseemos.
2. Lo que representamos a los ojos de los demás. La reputación es tan efímera como la riqueza material. Schopenhauer escribe: «La mitad de nuestras preocupaciones y ansiedades provienen de nuestra preocupación por las opiniones de los demás; debemos quitarnos esta espina de la carne». El afán por hacer una buena apariencia es tan fuerte que para algunos presos, cuando caminan hacia el lugar de la ejecución, lo que más les preocupa es el vestido y sus últimos gestos. La opinión de los demás es un fantasma que puede cambiar de rostro en cualquier momento. Las opiniones penden de un hilo y nos esclavizan a lo que otros piensan o, peor aún, a lo que parecen pensar, porque nunca podemos saber lo que realmente piensan.
3. Que somos. Sólo lo que somos tiene valor real. Una buena conciencia, dice Schopenhauer, vale más que una buena reputación. Nuestro mayor objetivo debe ser la buena salud y la riqueza espiritual, lo que conduce a reservas inagotables de ideas, independencia y vida moral. Nuestra tranquilidad viene de saber que lo que nos trastorna no son las cosas, sino nuestra interpretación de las cosas.
Este último pensamiento, que nuestra calidad de vida está determinada por la forma en que interpretamos nuestras experiencias, no por las experiencias en sí mismas, es una importante doctrina curativa que se remonta a la antigüedad. Oficina central en la escuela del estoicismo, pasó de Zenón, Séneca, Marco Aurelio, Spinoza, Schopenhauer y Nietzsche y llegó a convertirse en un concepto fundamental tanto en la psicoterapia psicodinámica como en la cognitiva-conductual.
* Extracto del libro de Irvin Yalom «En el jardín del Auxiliar», traducido por Evangelia Andritsanou – Giannis Zervas, publicaciones de Agra.
El psicoterapeuta y autor estadounidense Irvin D. Yalom, profesor emérito de psiquiatría en la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford, nació el 13 de junio de 1931 en Washington.
Hijo de inmigrantes polaco-judíos analfabetos que trabajó duro en un barrio pobre de Washington para construir una nueva vida, Yalom, habiendo encontrado en los libros el refugio que buscaba, estudió mucho y logró seguir una notable carrera académica.Universidad de Boston, Mount Hospitales Sinaí y Johns Hopkins).
A partir de 1962 inició su dilatada carrera en la Universidad de Stanford, que se prolongó hasta 1994.
A los 15 años, Yalom conoció y se enamoró de Marilyn Koenick (1932-2019), con quien se casó en junio de 1954 y tuvo cuatro hijos.
Alumno y colaborador del distinguido psicólogo estadounidense Rollo May (1909-1994), Yalom es considerado el inspirador de la escuela existencial de psicoterapia, y es el autor del libro de texto más autorizado y completo de psicoterapia existencial (Psicoterapia Existencial, 1980).
El trabajo clínico y de investigación de Yalom en psicoterapia de grupo es particularmente conocido en el campo científico.
Su primer libro titulado «Teoría y práctica de la psicoterapia de grupo» (La teoría y practica de grupo Psicoterapia, 1970) ha sido traducida a muchos idiomas y sigue siendo un libro de texto básico en muchas escuelas de psiquiatría y psicoterapia.
Yalom ha escrito muchos más libros y artículos de ciencia.
Su obra literaria, que comenzó tarde, incluye colecciones de cuentos y novelas, que se han convertido en éxitos editoriales en muchos países.
