Un fenómeno bastante común, que se observa en el contexto de un esfuerzo por perder peso, es la incapacidad del cuerpo para perder más libras después de perder algunas iniciales y estabilizarlas. El resultado es La balanza «cuelga» y ver que nos quedemos en el mismo peso. Seguimos la dieta al pie de la letra y hacemos esfuerzos ambiciosos para hacer ejercicio regularmente. La báscula, sin embargo, se niega obstinadamente a mostrarnos menos kilos. Lo primero que debemos decir es que este es un desarrollo que se observa a menudo y no debe preocuparnos y desanimarnos de continuar nuestro esfuerzo. Pero, ¿cuáles son los factores responsables?
Detención
La retención de líquidos, que mantiene la balanza «pegada», se debe muchas veces al consumo excesivo de sodio y alcohol. Por lo tanto, los dietistas recomiendan que durante la dieta usemos la mínima sal en la cocina y evitemos las